10. EL VALOR HUMANO Y EL PRECIO DE LAS COSAS
Todos
los humanos somos seres muy valiosos
por estar dotados de prodigiosas potencialidades, las que nos hacen dueños de
una elevada actitud de bien y de sabiduría, lo cual nos permite tener al alcance
de nuestras manos un mundo maravilloso lleno de cosas preciosas para así poder convivir honrada, digna y
pacíficamente (humanamente).
Tú,
él, ella, yo, todos valemos mucho y por
igual, pues todos tenemos un corazón muy pródigo en amor infinito y
desinteresado que nos premune de tanta bondad que todas las cosas del mundo
juntas jamás podrán valer como vale un solo ser humano. Todo esto sumado a una
poderosa e inagotable creatividad hacen que constantemente podamos recrear el
mundo sin perjudicar a nadie ni dañar nada.
El
amor autotélico que anima toda
actitud humana tiene dos subdimensiones: El amor que nos tenemos a nosotros
mismos (autoestima) y el amor que debemos a las demás entidades del entorno
naturosocial (estima). Ése amor autotélico (que es un fin en sí mismo) es el
que nos eleva espiritualmente por
sobre todas las demás entidades asumiendo así, como seres humanos, la responsabilidad
protagónica de todo lo existente.
Mas, si este amor se resiente, se debilita, se contamina o se envilece, entonces el
pobre hombre se vuelve capaz de rebajarse a la condición del ser más vulgar, la
fiera más sanguinaria, la escoria más vil y nociva. Sin amor es imposible valer, para nosotros mismos y para los demás, como humanos. Valemos cuanto y cual amamos.
Llenémosle
al niño de amor y le habremos proveído,
de por vida, de la energía suficiente para remontar el camino más escabroso, largo
y empinado, a la vez que le habremos inmunizado
ante todos los males del alma.
El
humano colmado de amor se hace el ser más humilde y más fuerte a la vez.
Con
la energía que nos da el amor son bienvenidos: Los errores que nos traen capacidad de enmienda, los sufrimientos que nos ayudan a ser
fuertes, las dificultades que nos
traen afán de superación, los problemas
que invitan a nuestra imaginación o retan a nuestro raciocinio a
resolverlos, los enigmas que nos
provocan el descubrirlos.
Por
amor nos servimos de todos los recursos existentes para el logro del bien de todos, sin apropiarnos avaramente de nada ni
de adueñarnos egoístamente de nadie.
Por amor siempre haremos cosas trascendentes, sin amor las haremos ordinarias, mientras que por odio sólo haremos cosas mezquinas, ruines o crueles.
Por amor siempre haremos cosas trascendentes, sin amor las haremos ordinarias, mientras que por odio sólo haremos cosas mezquinas, ruines o crueles.
El
amor autotélico nos libera de nuestros
propios “demonios”, de los ajenos y de sus vanidades haciéndonos seres espiritualmente
valiosos, colocándonos a cada uno muy por encima del
precio de todas las riquezas materiales del mundo juntas. He aquí que la afectividad es la dimensión humana por excelencia y de ella depende
mucho nuestra educabilidad y educatividad y, en consecuencia, nuestra dignidad y hombría de bien.
Cuando los humanos asumamos, firme e indubitablemente, que tenemos valor y no un precio como las cosas y que, por consiguiente, somos, todos, un fin y no un simple aunque útil medio como es el caso de aquellas, entonces recién nos habremos realmente liberado por fin de ser cada cual un objeto más de este salvaje mercado global en el que se compra conciencias y hasta se vende vidas.
Esta liberación es sólo posible con una educación verdadera, con una educación trascendente.
Muy triste es constatar a cada paso que muchas personas, y con mayor frecuencia las más instruidas, hayan endosado su valor al dinero y que cuiden demasiado de su apariencia y poco o nada de su dignidad.
¡Ésa es la peor pobreza, la pobreza espiritual!
Esta liberación es sólo posible con una educación verdadera, con una educación trascendente.
Muy triste es constatar a cada paso que muchas personas, y con mayor frecuencia las más instruidas, hayan endosado su valor al dinero y que cuiden demasiado de su apariencia y poco o nada de su dignidad.
¡Ésa es la peor pobreza, la pobreza espiritual!
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